martes, 9 de diciembre de 2008

YOGA: EDUCACION ESPIRITUAL.



El Yoga es: una ciencia, arte y filosofía de vida psicofísica-espiritual que integra estos tres
planos de la existencia del ser humano entre sí y al individuo con el Universo, lo Supremo, Dios
o el Todo, mediante el SAMADHI o estado de plenitud existencial, felicidad, dicha.
La primera técnica enseñada en los Sutras, ha sido el viyoga o sea la capacidad de separar lo
espiritual de la mente y el cuerpo. Nosotros somos lo que sentimos, porque lo espiritual de
nosotros y de algo, es lo que se siente en un momento determinado generando un estado
afectivo. El Yoga enseña a desarrollar la inteligencia espiritual del ser humano entendiéndola
como capacidad de adaptación afectiva sentimental y anímica de un individuo a su entorno.
Esta capacidad de adaptación espiritual permite al yogui sobrellevar sentimientos y situaciones
que a otras personas les resultarían insoportables.
El yogui como cualquier practicante de yoga aprende a sentir. Comienza a entender y aprender
que él no sólo es lo que piensa o cree (mente) o lo que a su vez hace mediante actos (cambios
físicos del mismo cuerpo y de las cosas que lo rodean: acciones). El yogui comienza a
entender que su espíritu es lo que él mismo siente. Y comienza a saber que es más importante
Ser que Tener. Es más importante ser médico, actor o profesor de yoga que tener un título de
médico, actor o profesor de yoga. Es más importante ser feliz que tener cara de felicidad.
Porque la felicidad nunca se tiene, siempre se logra cuando se es feliz. La libertad es poder
ser, porque el tener es siempre pasajero. Para ser uno mismo uno debe aprender a ser. Y para
aprender a ser, uno debe comunicarse con su ser interior, con sus sentimientos, pasiones y
anhelos, con sus afectos y estados anímicos. Nuestro mundo afectivo es nuestro Espíritu. Si
decimos que la inteligencia espiritual del ser humano es la capacidad de adaptación afectiva,
sentimental y anímica de un individuo a su entorno, el Yoga como ninguna otra ciencia, nos
permite trabajar en la inteligencia afectiva (capacidad de entender y adaptarse a los
sentimientos y afectos de los otros) así como con la inteligencia emocional (capacidad de
entender y adaptar las emociones a nuestro ser).
La Finalidad del Yoga no es integrar psicofísica-espiritual al ser humano, la finalidad del Yoga
no sólo es la integración social y eto-ecológica del individuo. La finalidad del Yoga hace 5000
años es el Samadhi, esa experiencia de Plenitud existencial que nos integra con Dios, el
Universo o el Todo. Y esa experiencia sólo se logra con la educación espiritual; y cuando
decimos educación espiritual, no nos referimos a educación religiosa ni a religiosidad. Ser
espiritual no significa ser religioso y ser religioso no ciertamente significa ser espiritual. Nos
referimos a que el espíritu y la espiritualidad se pueden transitar desde el mismo arte; pocas
cosas son tan espirituales como el arte. El arte es la expresión de espíritu. El arte expresa
nuestros sentimientos. Si entendemos esta visión podemos comprender como un asana o
postura de yoga puede llegar a ser espiritual simplemente por la actitud (predisposición a un
acto).
Etimológicamente, significa integrar o atalajar. Integrarme a algo atalajándolo. Colocar el
atalaje a los caballos de tiro para luego guiarlos. Y así integrarme a ellos y al carro. Yog viene
de Yug. Yug significa unir y Yog integrar. SE PUEDE POR ESTA RAZÓN DECIR YOG O
YOGA
El término Yoga: el vocablo deriva etimológicamente de la raíz verbal YUJ que significa "Unión
Dinámica", "Integración", "Atalajar", "Atar junto". Puede tener otras connotaciones como:
"Unión", "Conjunción de estrellas", "Regla gramatical", "Esfuerzo", "Equipo",
"Medios", "Magia", "Agregado", etc. Se relaciona con el vocablo inglés YOKE, el francés JOUG,
el Alemán JOCH, el Griego EUVOC, el Latín IUGUM, el Ruso IGO, el Español YUGO.